MUERTE INNECESARIA

MUERTE INNECESARIA. 
 Desde hace mucho tiempo, estoy realizando acciones y difusión de la problemática de seguridad que afecta a cada uno de nosotros, que como vecinos diariamente estamos en la calle con nuestras obligaciones laborales y sociales. 

 Procurando inculcar y alertar a las autoridades, situaciones comunes que nos afectan a todos por igual, es que, la inseguridad y la violencia ejercida por las personas que se hallan en conflicto con la Ley nos afectan a todos por igual.
 Y noto que las autoridades pese a los llamados de alerta que uno les da, hacen oídos sordos a los mismos, se encierran en mundo lejano a los avisos del ciudadano, que mirando con sencillez lo que sucede en derredor da cuenta de ello y ofrece soluciones plausibles.
 Sé que hay un problema de comunicación entre la realidad que vivimos los ciudadanos comunes y la realidad de los funcionarios, lo lamentable es que esta falta de entendimiento entre ambos sectores, nos cobra cada día una víctima.
 En Almirante Brown, hace unos meses estaba a cargo de la Comisaria de Burzaco, el Comisario German Rustom, persona que en poco tiempo supo no solo granjearse el afecto de los vecinos, sino que dio muestras claras de lo que se debía hacer en materia de prevención y lograr de esa manera reducir la criminalidad en la zona.
 Cientos de vecinos elevaron sus felicitaciones, las que fueron tomadas por infinidad de medios periodísticos; y como premio a su dedicada labor, el Comisario Mayor Pirillo lo desafecto de la Comisaria. En esa oportunidad alerte a los ciudadanos que la seguridad de todos nosotros estaba en peligro, por la falta de prevención que debía diseñar el mismo Perillo.
 Y como lo había anunciado, días posteriores comenzó en la zona un raid delictivo nunca antes visto, costándole la vida a varios vecinos; crímenes que aún están impunes.
 Me pregunte esos días, ¿cómo puede ser y a quién beneficia o molesta que un funcionario cumpla con lo que marca la Ley, que es darnos la protección necesaria para tener una seguridad en nuestras vidas, lo desafecten del lugar donde realiza su trabajo en forma efectiva y reconocida por los vecinos?
 Tras la seguidilla de homicidios, vino la frutilla del postre, es que Pirillo, fue trasladado a la Departamental de Lanús, y la historia volvió a repetirse, traslado a Comisarios que cumplían sabiamente sus tareas; y la prevención que el debe diseñar, bueno los cadáveres de los vecinos de Lanús testimonian la labor inteligente de Perillo.
 A fin de evitar que se repitiera nuevamente la estela de crímenes impunes que dejo Pirillo, a su paso por Almirante Brown, es que el 29 de agosto, envié comunicación al Intendente de Lanús y al Ministro de Seguridad, alertándolos sobre lo que pasaría y que el fin era evitar otra muerte en Lanús; pero es evidente que no hay comunicación entre la sociedad y las autoridades.
 Una inocente mujer, pago con su vida la ineficiencia policial y la sordera de las autoridades; me causa profunda indignación e impotencia que pese a las estadísticas criminales tan utilizadas por las autoridades cuando no quieren reconocer la realidad de los hechos, no se halla valorado la actividad profesional de Perillo, antes de ponerlo como responsable de la seguridad en Lanús.
 A las autoridades, es hora de que aprendan un poco de la teoría de las restricciones, de una policía proactiva, eficiente, que dignifique la calidad de los funcionarios comprometidos socialmente con su tarea y no que se los premie con una departamental como hicieron con Perillo; premio que se pago con la sangre de los vecinos de Lanús.
 Y a la actitud crítica, también sumo ideas, hoy la policía como estructura esta como un elefante blanco, tiene tantas dependencias de control que no controlan, que deberían pensar en eliminar algunas; para el ciudadano común, en cada municipio hay una departamental, una distrital, y centro de monitoreo, mas las comisarias. En lugar de tener tantas dependencias, a fin de racionalizar los medios, unir todas ellas en una sola, podrían tener más efectivos en las calles, patrulleros y los gastos de funcionamiento se reducirían en un tercio.
 Escuela de Policía, sería bueno que se cree una carrera de bachiller con orientación a la prevención y seguridad ciudadana, donde el alumno a partir del tercer año reciba educación de derechos humanos, legislación y derechos universales; es que para tener a un policía efectivo y preparado debemos recurrir a nuestros jóvenes que son la esperanza de nuestro país.
 Hoy, con solo haber aprobado el secundario, en nueve meses, te hacen policía, sin tener un pleno dominio de lo que significa “derechos humanos”, y doy fe de ello porque muchas veces le he preguntado a un policía sobre un artículo del C.Penal, C.Procedimiento o Constitución y solo me ha respondido un largo silencio.
 Hay que entender que la función policial es una vocación profesional y no un trabajo de fácil ingreso, sus largas horas de servicio conspiran contra su buen desempeño y sus magros sueldos terminan la tarea.
 La policía debe ser profesional y como un buen profesional debe ganar lo que corresponde; solo los más aptos deben permanecer en función y aquellos que demuestren estar comprometidos con la prevención que la sociedad necesita.
 Me molesta que cuando uno va a la Comisaría, al decir hola buen día, le respondan con autoritario “si, que quiere” como si fuéramos una molestia; me molesta que al referirse a un vecino digan “ usted es un civil”, como si ellos pertenecieron a otra clase social, sin darse cuenta que la Policía es una institución “civil armada”.
 Por imperio del Art.14 de la Const. Prov., tenemos el derecho de peticionar a nuestros representantes, hagámoslo, no esperemos a ser la próxima víctima.

 Alfredo Silverio Rodriguez 
 DNI.11894278 
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