La Cruz de Matará ya peregrina por la diócesis
Con una visita a un geriátrico y una misa que presidió hoy el obispo auxiliar de la diócesis, monseñor Jorge Torres Carbonell, en el cierre de un retiro misionero, comenzó la peregrinación por la Iglesia diocesana de la “Cruz de Matará” que se extenderá hasta el próximo sábado.
“Que crezcamos juntos en toda la tarea misionera en la vida de nuestra muy querida diócesis”, expresó monseñor Torres Carbonell a los animadores de IAM, dirigentes, referentes y coordinadores de jóvenes y grupos misioneros que participaron desde ayer en el encuentro de oración que se desarrolló en el colegio San Bonifacio. “La misión nos agranda la mirada de la fe, de la vida y de la Iglesia”, completó.
Cruz de Matará: significado e importancia de la visita a la diócesis
La “Cruz de Matará” -símbolo que testimonia la evangelización del continente, la creatividad y el esfuerzo de los primeros misioneros para transmitir el Evangelio en la cultura nativa de los matarás, una tribu que habitaba el sudeste de Santiago del Estero, por entonces capital del Tucumán- estuvo ayer en la zona del parque municipal de Lomas de Zamora y visitó un geriátrico, donde los jóvenes rezaron con los ancianos. A la noche la cruz llegó a la parroquia Sagrado Corazón.
Organizada por el Equipo de Animación Misionera, cuyos directores son Alberto Andrade y Mariana Zeballos, la cruz peregrina llegó esta noche a la “Misa Joven” en la capilla Nuestra Señora del Rosario de San Nicolás, pegada a la estación Temperley, del lado este.
Mañana se acercará a la parroquia San Cayetano (Burzaco) que celebrará su fiesta patronal; el martes estará en Claypole, en el “Hogar de Cristo” donde jóvenes se recuperan de las adicciones y en el cottolengo “Don Orione”, y el miércoles y jueves en las estaciones de tren, ramal Temperley-Alejandro Korn y Temperley-Ezeiza.
Con una visita a un geriátrico y una misa que presidió hoy el obispo auxiliar de la diócesis, monseñor Jorge Torres Carbonell, en el cierre de un retiro misionero, comenzó la peregrinación por la Iglesia diocesana de la “Cruz de Matará” que se extenderá hasta el próximo sábado.
“Que crezcamos juntos en toda la tarea misionera en la vida de nuestra muy querida diócesis”, expresó monseñor Torres Carbonell a los animadores de IAM, dirigentes, referentes y coordinadores de jóvenes y grupos misioneros que participaron desde ayer en el encuentro de oración que se desarrolló en el colegio San Bonifacio. “La misión nos agranda la mirada de la fe, de la vida y de la Iglesia”, completó.
Cruz de Matará: significado e importancia de la visita a la diócesis
La “Cruz de Matará” -símbolo que testimonia la evangelización del continente, la creatividad y el esfuerzo de los primeros misioneros para transmitir el Evangelio en la cultura nativa de los matarás, una tribu que habitaba el sudeste de Santiago del Estero, por entonces capital del Tucumán- estuvo ayer en la zona del parque municipal de Lomas de Zamora y visitó un geriátrico, donde los jóvenes rezaron con los ancianos. A la noche la cruz llegó a la parroquia Sagrado Corazón.
Organizada por el Equipo de Animación Misionera, cuyos directores son Alberto Andrade y Mariana Zeballos, la cruz peregrina llegó esta noche a la “Misa Joven” en la capilla Nuestra Señora del Rosario de San Nicolás, pegada a la estación Temperley, del lado este.
Mañana se acercará a la parroquia San Cayetano (Burzaco) que celebrará su fiesta patronal; el martes estará en Claypole, en el “Hogar de Cristo” donde jóvenes se recuperan de las adicciones y en el cottolengo “Don Orione”, y el miércoles y jueves en las estaciones de tren, ramal Temperley-Alejandro Korn y Temperley-Ezeiza.
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